No estábamos dispuestos a dejar pasar un soleado sábado de febrero, sin que pedaleásemos por alguna de nuestras rutas favoritas. Sabíamos que iba a hacer fresquito, pero ya estamos acostumbrados. En mi caso, me moría por salir de nuevo tras varias oportunidades perdidas. Quería estrenar y probar mi nueva montura, una CAMBER EXPERT 26' con 12,7 kg en orden de marcha.
En el parking de Mercadona de Tres Cantos hemos comprobado, mientras poníamos a punto mi bici, que el fresquito era en realidad -7º a la sombra, y se nos congelaba el alma pensando en la bajada del Foxá al muro del monte del Pardo.
Quién dijo miedo! El Secre, Val, Álvaro, Javier de D, Jesús y servidor, hemos superado la prueba, aunque algunos tenían síntomas de congelación en la punta de los dedos al llegar al arroyo.
Al vadearlo hemos roto las placas de hielo matinales, pero no ha habido baño afortunadamente. Pedaleamos hasta el puente de la Marmota y subimos ligeros por el sendero hasta llegar a la pista. Antes de afrontar los repechos pestosos, nos hemos quitado algo de ropa. Un poco más adelante hemos encontrado a Álvaro.
No hemos podido evitar la tentación de hacer la trialera antes de la carretera de Hoyo, a pesar de la prisa de Javier. Lo nuestro es vicio.
Camino del puente medieval, algunos nos hemos arrepentido de habernos despojado de ropa anteriormente. Velocidad y viento frío de cara nos han vuelto a congelar la carrocería.
El camino de Santiago hacia Colmenar me ha servido para empezar a probar mi nueva bici. Todavía falta que la afine, pero sube como las cabras por los sitios un poco técnicos. Para bajar también es muy segura, aunque todavía no he apurado. En posición propedal no tengo sensación de perder energía. En fin, que a pesar de ser el primer día estoy muy satisfecho de las sensaciones que me ha proporcionado. Ya os iré contando cómo se porta a medida que tenga alguna salida más.
Como siempre, el Secre se ha sacado una propina del bolsillo y hemos bordeado Colmenar antes de bajar al arroyo y vadearlo creo que nueve veces. Nos hemos mojado, pero la temperatura era ya mucho más asequible.
La subida al Foxá es como siempre el último reto del día.
Hoy no ha habido cerveza, pero el próximo día tendremos que bebernos dos, que hay que regar a la CAMBER.
No sé cuantos kms hemos hecho, pero le pido al Secre que complete la crónica de este precioso día azul con los datos que considere oportunos.
En el parking de Mercadona de Tres Cantos hemos comprobado, mientras poníamos a punto mi bici, que el fresquito era en realidad -7º a la sombra, y se nos congelaba el alma pensando en la bajada del Foxá al muro del monte del Pardo.
Quién dijo miedo! El Secre, Val, Álvaro, Javier de D, Jesús y servidor, hemos superado la prueba, aunque algunos tenían síntomas de congelación en la punta de los dedos al llegar al arroyo.
Al vadearlo hemos roto las placas de hielo matinales, pero no ha habido baño afortunadamente. Pedaleamos hasta el puente de la Marmota y subimos ligeros por el sendero hasta llegar a la pista. Antes de afrontar los repechos pestosos, nos hemos quitado algo de ropa. Un poco más adelante hemos encontrado a Álvaro.
No hemos podido evitar la tentación de hacer la trialera antes de la carretera de Hoyo, a pesar de la prisa de Javier. Lo nuestro es vicio.
Camino del puente medieval, algunos nos hemos arrepentido de habernos despojado de ropa anteriormente. Velocidad y viento frío de cara nos han vuelto a congelar la carrocería.
El camino de Santiago hacia Colmenar me ha servido para empezar a probar mi nueva bici. Todavía falta que la afine, pero sube como las cabras por los sitios un poco técnicos. Para bajar también es muy segura, aunque todavía no he apurado. En posición propedal no tengo sensación de perder energía. En fin, que a pesar de ser el primer día estoy muy satisfecho de las sensaciones que me ha proporcionado. Ya os iré contando cómo se porta a medida que tenga alguna salida más.
Como siempre, el Secre se ha sacado una propina del bolsillo y hemos bordeado Colmenar antes de bajar al arroyo y vadearlo creo que nueve veces. Nos hemos mojado, pero la temperatura era ya mucho más asequible.
La subida al Foxá es como siempre el último reto del día.
Hoy no ha habido cerveza, pero el próximo día tendremos que bebernos dos, que hay que regar a la CAMBER.
No sé cuantos kms hemos hecho, pero le pido al Secre que complete la crónica de este precioso día azul con los datos que considere oportunos.
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