Cuando Juan convocó este fin de semana lo vi claro, el domingo era mi día. La convocatoria para el sábado sólo de verla me daban escalofríos. Si no acaba con nosotros por agotamiento será por congelación, -12º de sensación térmica. Dejé pasar el día para ver quienes se animaban y finalmente el espíritu aventurero se impuso.
Allí no vimos subiendo Juan, Juan B. y yo. Había poca nieve pero en cuanto salimos de la vía principal no tardó en llenarse hasta tener en algunos tramos más de 20cm. La subida era dura y la estabilidad nula.
Llegamos a la carretera de la República y me empecé a quedar atrás, me estaba costando demasiado seguirles y no sabía lo que me ocurría... Otros locos que también subían a la Fuenfría me lo dijeron, ¡había pinchado en la nieve! Ya reparado el pinchazo seguimos subiendo y nos encontramos a uno que bajaba ¡esquiando!, surrealista lo del sábado... En el desvío para coger la trialera de Juan B. Juan estuvo intentando salvar la cámara pero nuevos problemas con las baterías nos dejaron sin video.
La bajada fue una sensación espectacular ya que sabes que todas las piedras están ahí debajo pero no sabes exactamente dónde. Juan fue grabando con la cámara de fotos la bajada y decidimos que por ese día ya era suficiente ya que el frío pudo con nosotros.
¡Una experiencia única!
Alvaro.
NOTA DEL SECRETARIO: Una vez más, con el frío, no pude hacer el cambio a la segunda batería. Cuando íbamos a bajar por la vereda de enmedio el vídeo no arrancó, así que tuve que grabar algunas escenas con la cámara de fotos, en plan estático. Ciertamente, estábamos a -4º más el factor del viento. Tendré que buscar algún sistema para calentar las baterías y la cámara en esta época el año. Comprendo que queréis que lleve una barbacoa y de paso hacer algunas cositas a la brasa, pero estoy pensando en algó más portable...
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