Angel estaba perezosillo y ha preferido dormir un poquito más para salir desde casa, por lo que en mi re-estreno Boulder (dos meses sin salir) he quedado únicamente con Jacobo para rodar por Cercedilla.
Como no tenía claras las sensaciones y lo que iba a dar de si el día nos pusimos camino a la Fuenfría para ver como transcurría el asunto sin concretar que vendría después.
En esto que me dice Jacobo que nunca ha subido a la Bola. Menudo dilema moral. Sin decir nada al respecto pasamos por un muy transitado Camino Smidt hacia Navacerrada y una vez allí, viendo que mi estado no era tan lamentable como esperaba, le sugerí a Jacobo la posibilidad de subir la Bola, y claro, no se hizo de rogar.
En pocos metros le perdía la pista y para mi comenzaba una penosa ascensión que al menos se vio recompensada por las espectaculares vistas que nos ofrece el pico y por un día espléndido y soleado. Así que una vez repuestos y con todo el esfuerzo del día hecho, bajamos de nuevo para ir hacia Cercedilla por el camino del Calvario.
Llegada temprana y para mi un buen sabor de boca teniendo en cuenta la situación. Pocos kilometros pero un buen ascenso acumulado.
Buenas noticias Bouder; Jacobo vuelve a trabajar en Madrid por lo que estará mas libre para acompañarnos en nuestras salidas de fin de semana.
Hasta la próxima.
Alvaro.
No se os puede dejar solos. Esta es una de las rutas que quiero probar tras la convalecencia. Pero hay más. Enhorabuena monstruos!
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